miércoles, 2 de junio de 2010

Alas






... ¡Oh, cuán lejos podría llegar! ¡Cuántos mundos no se me revelarían… sólo con que me atreviera a volar! —exclamaba el pájaro ante la puerta, abierta, de su jaula.


11 comentarios:

núria dijo...

Las jaulas, ni de oro!

Wara dijo...

Sí, es más sano mantenerlas lejos de vista, de corazón y de todo.

Besos.

Apple dijo...

y asi estamos todos!!
somos libres, tenemos las puertas abiertas a todo todo.. pero las cadena y jaulas imaginrias no nos dejan volar!
no hay libertad!, porque no nos permitimos ser libres!

RebecaTz dijo...

Así es, Wara, además "el que no arriesga, no gana".
Abrazos.

Wara dijo...

Apple, es que no hay peor jaula o prisión o límites que los que nos imponemos a nosotros mismos.


Andromeda, cuántas cosas nos perdemos por no atrevernos a hacer lo que en el fondo nos es tan natural, como el volar lo es al pájaro.

Besos a las dos.

Almudena dijo...

¿De qué sirve tener alas si no te han enseñado cómo usarlas?

Anda usted muy brillante últimamente. No me da tiempo a asimilarlo todo :)

Besucos.

Wara dijo...

Tienes razón, Anjanuca, a veces es verdad que hace falta alguien que nos guíe, no basta con disponer tan sólo de las herramientas.

Y gracias por lo del brillo. -:)

Besos.

INDIA dijo...

Miedo, a conseguir, lo que el alma nos dicta...
Un saludo.

India.

Wara dijo...

Es verdad, cuantas veces uno mismo tiene miedo de conseguir lo que realmente desea, y se retrae... Terrible contradición.

Besos, queria India.

AdR dijo...

El pájaro como símil de un corazón, o viceversa.

La foto queda perfecta junto a tu texto y con el fondo en negro :)

Besos.

Wara dijo...

Aunque sin saberlo muy bien, pájaro y corazón anhelan lo mismo, Angel.

Ay, esa jaula dorada... es preciosa, sí. :) Besos.