sábado, 10 de octubre de 2009

Al otro lado del río

(…) me dijo el barquero:
las niñas bonitas no pagan con dinero.
(Canción infantil)



Habituada a que se cumplieran sus deseos y caprichos incluso antes de ser formulados, la bella princesa urgió al barquero:
—Llévame al otro lado del río, ¡presto!
—Pero, ¿no queréis conocer antes el precio? —preguntó el barquero, de torvo aspecto.
La princesa dejó oír una cantarina risa que creció en la noche y sobre el río. Con gesto orgulloso tomó asiento en el mismo centro de aquella barca desvencijada y vieja.
—Cueste lo que cueste, viejo barquero, pues no ignoras que soy la única hija de tus reyes —respondió. Y urgió, nuevamente:— ¡Date prisa! Al otro lado del río me aguarda el príncipe al que quiero.
—Pero no es el que vuestros padres eligieron; ni siquiera el que, por más que os ame, es quien más os conviene —murmuró, ladino, el barquero.
—¡Basta de charla, barquero! —exclamó la princesa, impaciente—. Haced lo que se os ordena, y en silencio.
—Así sea, princesa. Mas, os advierto que cumplir vuestra voluntad tiene un precio que no se paga con monedas.
El viejo barquero guardó entonces silencio y, tras tomar impulso para alejarse de la orilla, comenzó a remar con impensable fortaleza en alguien de su edad y apariencia.
Y ocurrió que al llegar a la orilla opuesta del río, tras un trayecto que se le representó eterno, la joven princesa ya era vieja; había pagado el precio de su empeño perdiendo lozanía, juventud y belleza.

Spencer Stanhome
Caronte y Psique, 1890

10 comentarios:

Druida de noche dijo...

EXCELENTE !! Qué buen relato. Me encantó, de verdad.

Malena dijo...

Mi querida Wara: No siempre lo que deseamos es lo que nos conviene. Creo que hay un viejo proverbio que dice algo así como: "que los dioses no siempre realicen lo que les pides". Me encanta que hayas elegido la imagen de psique y cronos.

Mil besos desde este puente en la Costa Brava.

Carmen Neke dijo...

Wara, te noto cierta parcialidad hacia los delincuentes duros pero de gran corazón, y un punto de inquina hacia las princesas de cuento de hadas... :)))))

Bien hecho, me encanta cómo pones a cada personaje en el sitio que le corresponde, y no en el que le ha otorgado la tradición.

Almudena dijo...

Hace tiempo que fantaseo con un libro encuadernado en cuero marrón, en la portada un castaño enrme y sentada bajo él un hada de los bosques leyendo un pergamino. Dentro, tus cuentos.

¡Lo que daría por tener ese libro en mis estanterías!

Besucos.

Jenn Díaz dijo...

¡¡Me encanta!! Mira que durante todo el cuento uno se va preparando para el final, porque sabe que algo va a pasar o con el príncipe o con el barquero o con la princesa. Algo diferente. Y aún así me ha sorprendido muchísimo, para bien, por supuesto.
Un abrazo.

Wara dijo...

Buenas noches y muchísimas gracias a todos (ay, Anjanuca, qué cosa tan preciosa me has dicho, mujer). No sé si es una lástima o no que las niñas ya no quieran ser princesas, pero al margen de la de este cuento (y es que ayer alguien se empeñó en complicarme el día), desde luego se pierden grandes cosas.

Un abrazo y feliz fin de semana, que es un poquito más largo para algunos.

Nitalen dijo...

Preciosa historia, con una gran moraleja.
Ains, cuando dejaremos de pensar como esta princesas y nos preocuparemos por las consecuencias de nuestros actos.
No siempre es fácil hacerlo.

Wara dijo...

Es difícil, tienes razón; la verdad es que en general solemos actuar sin reflexionar en las posibles consecuencias.

Un abrazo, Nita.

Dejame que te cuente dijo...

recordé inevitablemente,el tema "Al otro lado del rio" de jorge drexler....

mentalmente sonaba en mi cabeza amedida que leia el post....


encantada de visitarte......un abrazo
:-)

Wara dijo...

Ay, asociaciones musicales, jaja. Yo estoy escuchando ahora mismo a Héroes del Silencio a ver si me inspiro para escribir una historia que debe de tener la música como tema... Pues me parece que voy a escuchar el tema de Jorge Drexler, nunca se sabe...

Un abrazo, Fire, encantada estoy yo también con tu visita.