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... —Nunca me has amado —recriminó ella, la voz inaudible, agotadas las fuerzas tras el llanto callado—. De haberme amado, me habrías escuchado cuando te rogaba prudencia, que te cuidaras… Pero tú te reías de mis temores con aquella fuerza que no sabíamos dónde la hallabas. ¡Mira pues ahora lo que has conseguido! Me has dejado sola.
... —Nunca me has amado —recriminó ella, la voz inaudible, agotadas las fuerzas tras el llanto callado—. De haberme amado, me habrías escuchado cuando te rogaba prudencia, que te cuidaras… Pero tú te reías de mis temores con aquella fuerza que no sabíamos dónde la hallabas. ¡Mira pues ahora lo que has conseguido! Me has dejado sola.
Cementerio de Pere la Chais, París
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12 comentarios:
Este reproche me acaba de traer a la memoria a Carmen Sotillos, la protagonista de "Cinco horas con Mario" de Miguel Delibes.
Besucos.
Recuerdo con precisión haber leído ese libro de Delibes en primero de BUP, al igual de "Tardes con Teresa" y otros, pero lo extraño es que no recuerdo los argumentos. Como siempre, sería conveniente un repaso pero, como siempre, nos encontramos con que hay tanto pendiente que...
Besos, Anjanuca, feliz fin de semana.
hummm una muy buena reflexion sobre aquellos que ayudan para que otro cumpla un sueño, y luego, con el sueño cumplido, zas la soledad
beso
druida
Es cierto, cuantas veces se plantea ese hoy por ti, mañana por mi, y luego, como bien dices, cumplido el sueño... uno se topa con la soledad, el desengaño.
Besos.
Y qué importante es cuidarnos para los que nos quieren...
Un beso, Wara
Y tanto, pero a veces nos damos cuenta cuando ya es tarde.
Un beso, Ilona, feliz semana.
Quizás el que se fue ejerció su derecho a vivir como quería, aunque la otra cara de la moneda sea la soledad de haber dejado sola/o a quien amaba. La vida misma... en cinco horas con Mario todos nos podemos ver reflejados, creo yo.
Wara, me encanta que me hayas dejado un comentario pero si prefieres seguir entrando, como me dices, e irte en silencio, es tu derecho. Nada pasa. Pero mejor, leer tus afectuosas palabras.
Un abrazo
Sherezade
¿Sabes que pasa, Sherezade? Siempre que entro en un blog para leer la última entrada o quizás alguna anterior, no sé cómo hago que siempre me evoca algo, y entonces me quedo pensando un buen rato y con frecuencia resulta que "paso página" sin haber dejado siquiera un saludo. También es cierto que otras veces uno va con demasiada prisa... En fin, lo que importa es que me gusta leeros y que voy y vengo, y a mi modo ando por ahí.
Por supuesto, gracias a ti por tus visitas y comentarios. Muchos besos.
Dicen que no hay más sordo que quien no quiere oír. A veces las palabras pasan de largo y cada uno se queda únicamente con lo que hay en su mente.
Tal vez será mejor para ella esa soledad (que contar con tan vana compañía...)
Tenía un tío muy mayor al que le gustaba repetir un refrán que decía: "Al que por su gusto muere, hasta la muerte le sabe dulce" y es que en ocasiones como tú dices, en las que si uno no quiere atender a razones no hay nada que hacerle.
Un abrazo, feliz semana.
pues si...
es desolacion pura y dura la que sigue ala muerte..
no hay nada mas terrible...nada mas definitivo...
encantada de leerte como siemrpre...
un abrazo
Tras la muerte todo arrepentimiento, toda prevención, todo aviso pierde su sentido.
Un abrazo, Fire, para mí también es todo un gusto leerte.
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